A inicios de este año murió Anthony, un perro mestizo que había pasado toda su vida con una familia de Buenos Aires (Argentina). Sus dueños no lograban superar el duelo durante meses y se decidieron por la clonación, informa La Nacion de Argentina.
Según el medio argentino, se trata del primer caso en el país en que se clona a un perro. La familia, que prefirió no dar a conocer su nombre, se contactó con la empresa Biocan, que representa en Argentina y la región al laboratorio de Corea del Sur, Sooam Botech Research Foundation.
El argentino Daniel Jacoby, dueño de la compañía, creada en el 2015, en una entrevista concedida a La Nación habló sobre el papel de los biólogos y veterinarios de la Facultad de Agronomía en el procedimiento, que se realiza en su mayor parte en el laboratorio surcoreano.
“El can es el animal más humanizado del planeta, al punto que convive con nosotros, duerme con nosotros, come con nosotros, lo llevamos de vacaciones y entiende el idioma del país en el que se lo cría. Si el amor es el mismo, esto no cambia nada. Esto no va contra nadie ni estamos reviviendo a nadie. Hacemos un gemelo del anterior y le damos la posibilidad a la familia de volver a tenerlo”, indicó Jacoby al diario El País de España.
Además defendió el tratamiento cuestionado por los posibles riesgos para los animales clonados, así como del costo, los servicios están entre $ 60 mil y $ 100 mil.
El mecanismo de clonación de Anthony duró cerca de nueve meses, la primera parte se realizó en Argentina y la segunda en Corea del Sur. Una vez que muere el canino, hay un periodo de 72 horas para realizar la recolección de tejido, del que salen las células para la clonación, se indica. (I)
Fuente: http://www.eluniverso.com/
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