No soy una científica. Soy una autodidacta que se dejo guiar por su pasión por los loros. Es en un lenguaje sencillo que voy a compartir con ustedes los años que he compartido con ellos, mis observaciones y mi conclusión que les chocara a alguno.
¿Quién es Pascale?
Pascale es un yaco (loro gris africano), que fue abandonada aquí en el año 2000. No sé qué edad tenía exactamente, pero de acuerdo al color de sus ojos, no tendría un año. Reunía casi todos los defectos que se encuentran principalmente en un loro criado a mano , picaje crónico severo, automutilación de la piel, desestabilidad psicológica y emocional extrema, en definitiva, una pequeña bola de sufrimiento que respiraba y se agarraba a mi como la miseria sobre el mundo pobre. Probablemente es el caso mas grave que he tenido a día de hoy.
Sin la ayuda del DR: Jean Gauvin de la clínica veterinaria Lachine en Montreal, no sé si podría haber conseguido algo con ella y se lo agradezco desde el fondo de mi corazón.
Se le aplicaron varias terapias conocidas para ayudar a los loros en su situación, pero nada funcionó, tuvimos resultados durante un corto período de tiempo pero venia una recaída.
Pascale tenia miedo de casi todo, sobre todo de otras aves, llegaba a lanzarse al vacío cuando se le aproximaba un congénere, llegando a lesionarse . Hubo que darle puntos un par de veces. El veterinario y yo estábamos resignados a lo que es por el resto de su vida y personalmente, yo estaba lista para quedármela y amarla a pesa de todo.
Pascale tardo seis años en conseguir tener sus plumas y aun esta lejos de ser lo que yo llamo un pájaro equilibrado . Sigue siendo muy frágil. Basta un pequeño stress no atendido ,de una inseguridad que vuelve a flotar para que me encuentre todas sus plumas en el fondo de la jaula. "et voilá", volvemos a empezar desde la casilla numero uno!!
Creo que en gran parte, los avances obtenidos por Pascale han sido motivados por Albertina, que también es un yaco (loro gris africano ) de unos treinta años. Se las arregló para ganarse la confianza de Pascual y la ha mimado y protegido como si fuera su bebé. Ella le ha enseñado por tanto en el tiempo, que era un pájaro y la base que va con esta nueva identidad.
Yo soñaba con verla volar algún día, pero las plumas de vuelo de su ala izquierda no crecían. Me encontré con una horrible cosa cuando me decidí a examinar más de cerca el ala ... el ala estaba amputada. ¡Qué triste que estas prácticas bárbaras todavía se practiquen hoy en día.
Para aquellos que no saben lo que es amputar un ala, esto es cortar la última sección del ala. Si se comparas con el brazo, es como si se corta la mano. Y esto se hace en frío, sin anestesia y es sólo con el fin de evitar que el pájaro de vuele. De hecho, tengo dos aves en esta situación. Y sé de otros.
Verdaderamente no hay que tener prisa, tener un amor incondicional, y una paciencia a toda prueba, para poder trabajar con estos pájaros y poder llegar hasta el final. En nombre de todas las "pascale" de este mundo, espero de verdad alumbrar la conciencia de las personas frente a estas maravillas de la naturaleza que son los loros. Enseñarles a respetarlos y a amarlos por lo que son y no por lo que queremos que
La Impronta
Hace mucho tiempo, nos dimos cuenta que un pollito se identificaba con el primer ser que veían sus ojos. . Es lo que llamamos impronta. Los seres humanos , fascinados por la belleza, la inteligencia y la capacidad que tenían los loros para imitar nuestro lenguaje, pensaron que sería maravilloso reproducirlos en cautividad y que sería mucho más fácil que capturarlos de la selva. Por otra parte, podrían pedir un buen precio y todo el mundo estaría contento.
Al principio se creía que la impregnación humana sobre las aves no podría tener masque resultados buenos con a la de aves de compañía, más concretamente los loros. La naturaleza humana acepta mal vivir con seres que tienen una manera de pensar diferente .
Por consiguiente, era necesario humanizar los loros para vivir con ellos sin tener que hacer grandes esfuerzos para domesticarlos. ¿No sería maravilloso compartir nuestra vida con un animal que puede aprender nuestro idioma, ser divertido, cariñoso, inteligente y que tenga además una apariencia exótica?
Así que hace alrededor de un cuarto de siglo una nueva moda a llegado al mundo aviar. Una práctica que consiste en quitarle los pichones a sus padres a la edad de veintiún días para darles de comer con la mano. Alimentarnos con una pasta comercial caliente que se administra al bebé con una jeringa cada dos horas al principio y luego cada cuatro horas y así sucesivamente. Esto garantizaría aves dóciles y sociables con los humanos sin tener que hacer mucho trabajo para ganar su amor y confianza. No hay necesidad de domesticarlos.
Además, rápidamente nos dimos cuenta de que retirando las crías del nido, provocábamos otra puesta en los padres. Por tanto mas aves para vender y mas beneficio final.
Yo misma he practicado esta técnica cuando criaba. Porque cuando empecé, escuchaba y creía lo que se decía en este medio. Por contra, hace una veintena de años, no retirábamos a los bebés antes de veintiún días de vida para todas las especies. En estos días, los polluelos son separados de sus padres cada vez mas y más jóvenes y las consecuencias son más profundas.
Siendo mi curiosidad y mi amor por las aves más fuerte que cualquier cosa , tenía que tener mis propias experiencias y observaciones. He pasado noches escondida en una esquina del aviario para observar y escuchar lo que estaba sucediendo en su pequeño mundo. Teniendo la suerte de tener algunas parejas que confiaban en mí y me permitían la oportunidad de verlos hacer su trabajo en su nido, rápidamente me di cuenta que todos estábamos equivocados y hacíamos todo al contrario.
No creo que un ser humano, incluso con la mejor voluntad del mundo pueda hacer el trabajo de mamá y papá loro, tambien como ellos. Mis observaciones me han enseñado que los padres cuidan a sus pichones las veinticuatro horas del día. Es muy emocionante ver todo el cariño y el amor que le ponen.
Pasan su tiempo en el mimado, darles calor, darles el pico, las caricias sea día o noche. Son necesarias varias semanas antes de que ambos padres salgan del nido a la vez y es por un período de tiempo muy corto. Los bebés nunca están solos y se alimentan con mayor frecuencia que la sabiduría convencional nos enseña.
A veces es mamá, a veces es papá. El trabajo se divide por igual entre ellos. En general, la mamá está en el nido mas que papá, pero no hay menos trabajo. Debe venir con regularidad para darle de comer a ella y a sus pequeños no les falta de nada, él también debe venir a la relevarla para que ella pueda ir a estirar las patas, tomar un baño y comer algo de comida fresca. La sopa es buena pero.... También tiene que montar guardia y evitar que los intrusos se acerquen a su frágil y preciosa familia. La protección es la consigna!
Solo han tenido que pasar algunos años para empezar a darse cuenta de los devastadores efectos de esta práctica.
Poca gente se levantará a intervalos regulares durante la noche para alimentar a los polluelos y especialmente tomarse el tiempo necesario para darles afecto y acariciarlos para dormirlos de nuevo. Le llenamos el buche de un solo trago, lo ponemos en su acuario y no lo volvemos a ver hasta la siguiente toma. Los bebés necesitan la presencia constante y constante significa aquí 24/24. (aquí las 24 horas).
¿Ha pensado en los pobres pichones de tres o cuatro semanas se quedan solos entre las dieciocho horas de la tarde y las nueve o las diez de la mañana que es el horario de cierre de las tiendas de animales? Estos pobres pequeños pasan hambre y viven una terrible inseguridad y estrés. Eso sin contar los anticuerpos y las enzimas que los padres les proporcionan con lo que yo llamo la leche de buche para desarrollar y fortalecer su sistema inmunológico. Todos sabemos que es la mejor protección que podemos ofrecer para su salud y para el resto de sus vidas. ¿No hay algo contradictorio en esta práctica?
De acuerdo con las observaciones de Mark Bittner, autor de "The wild parrots of Telegraph Hill", sobre el que se filmó el documental del mismo título. Los jóvenes de cabeza roja estaban bajo la tutela de sus padres durante casi un año en la naturaleza (el tiempo varía dependiendo de la especie). En nuestras manos, se ven obligados a ser independientes a la edad de tres o cuatro meses. Piense en ello, permita que su hijo se vaya a un apartamento a la edad de cinco años?
Desde 1995 acojo loros abandonados y lo que he visto hasta ahora me dice mucho de nuestros errores. He necesitado muchos años de perseverancia, de observación, de indulgencia para lograr resultados con algunos casos.
¡No! No podemos hacer un trabajo tan bueno como el que siempre ha sido dictado por la naturaleza. Por la sencilla razón de que no somos pájaros.
Veo y escucho a la gente alterarse y clamar al cielo a la vista de un documental en el que vemos los cazadores furtivos subir a los nidos de loros para robarles los bebés. Tienen razón y condeno estas graves prácticas , es criminal! Pero la tragedia es que lo mismo sucede en nuestros criaderos. No hay mucha diferencia para mí. ¿Con qué derecho arrancamos a estos pobres bebés de sus madres?
Es un error creer que pájaro criado a mano será mas bueno y domesticado que uno que fue criado por sus padres. Ustedes tendrán esa ilusión los primeros años, pero pronto se darán cuenta que estas aves son en su mayoría desequilibradas.
En primer lugar, no tienen identidad (no debe confundirse con la personalidad) Están demasiado improntados con el humano y no están seguros de lo que son, ni saben cómo actuar, ni cómo vivir con felicidad. Su frustración es enorme. Se identifican con los humanos, pero no tienen el mismo derecho que ellos. No saben hacerse entender.
No es de extrañar que se enfrenten a tantos problemas de conducta a corto o largo plazo. El picaje crónico* , auto-lesiones (automutilación), una inseguridad patológica se conoce también como ansiedad, que es una plaga en nuestra sociedad y que le transmitimos a ellos por nuestra ignorancia y nuestra manía querer apropiarnos de todo y controlarlo todo.
También están los que gritan sin cesar y nos hacen la vida imposible, los que muerden sin motivo y que desarrollan una agresión hacia los seres humanos sin que estos entiendan que ha pasado, " era tan bueno"...
La impronta del humano sobre todo animal tiene efectos muy devastadores. No quitamos los cachorros de los perros y gatos sistemáticamente bajo el pretexto de hacerlos más buenos. ¿Entonces por qué lo hacemos con estas pobres aves ?. Por lo visto hay los mismo problemas con varios animales en los parques zoológicos que, por una razón u otra han sido criados por humanos. Tarda la mayoría de las veces varios años en aparecer pero.....
Haríamos bien en dejar que la naturaleza haga lo que tiene que hacer y que cada uno desempeñe sus funciones respectivas. Obviamente, si la pareja reproductora no se ocupa de sus bebes (que a veces sucede en cautiverio, y entiendo) la intervención humana puede ser apropiado para salvar estas pequeñas vidas. Pero creo que todos harían bien en dejar a los bebés con los padres al menos hasta que abandonan el nido por sí mismos. Y solo aquí comenzar a domesticarlos y a familiarizarlos con los humanos. Creo que obtendríamos compañeros más sólido y equilibrados y con cierta autonomía emocional, que es por desgracia bastante raro hoy en día. El trabajo del criador se reduciría y sería una domesticación en lugar de una maternidad.
Como con cualquier negocio, es la demanda y la oferta lo que prima. Por ahora viendo que la creencia de que la cría a mano es preferible , estas aves se venden a precios más altos debido a la demanda y el trabajo que supone para el criador.
También sabemos que no todo el mundo debería elegir un loro como mascota. Necesitan la libertad esto es "sucio", excrementos por todas partes para recoger todo el tiempo, tiran la comida al suelo debido a su papel en la naturaleza , es una forma de resiembra de los bosques, son destructivos y destrozan los muebles y todo lo que pueda meterse en el pico, que es para ellos una necesidad visceral, deben utilizar su pico porque crece constantemente. Ni que decir tiene que si usted es el tipo de persona que mantiene ordenada sus cosas, con una casa impecable y que mantener una mascota es aceptar que tiene que tratar con ella cuando quiera o cuando tiene tiempo, Olvídese de los loros. Es un ser que tiene una gran necesidad para la interacción y esto debe ser todos los días.
Pero si por contra a la luz de todo esto, usted está seguro de que el loro es la mascota para usted y está dispuesto a invertir en esa relación, entonces, sólo usted tiene el poder de cambiar las cosas. Empezando pidiendo pájaros criados por sus padres. Como mínimo, pida un pájaro destetado, algunos le ofrecerán un descuento considerable si coge un pájaro para terminarlo de alimentar a mano usted, RECHASELO!! vaya a otra parte. Pocas personas tienen el tiempo y conocimientos necesarios para llevar a cabo esa tarea y no será hasta años después que usted se dará cuenta de los problemas que esto causara a su mascota.
Autor : Marie-Therese Paillé
Traducción: Manuel Angel Jimenez
* El hábito de quitarse las plumas.
Fuente original: http://www.pourlamourdesperroquets.com/destinperroqueteam.htm
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Fuente: https://www.facebook.com/notes/aves-de-manuel/el-triste-destino-de-un-loro-criado-a-mano/453327052249